Un hilo de poliéster de uso general es ideal para la confección de la mayoría de las prendas debido a su resistencia, durabilidad y flexibilidad en una amplia variedad de tejidos, desde el algodón ligero hasta el denim.

El rayón o los hilos metálicos de alta calidad son excelentes para el bordado a máquina, ya que ofrecen un acabado brillante y vibrante y colores vivos que hacen que los diseños decorativos destaquen.

Para el acolchado a máquina, el hilo 100 % algodón ofrece un aspecto clásico y mate y combina bien con los tejidos de algodón, mientras que el hilo de poliéster resistente es el preferido por su durabilidad y resistencia.

La rotura del hilo suele deberse al uso de hilo de baja calidad, a un ajuste incorrecto de la tensión del hilo, a una máquina mal enhebrada o a una aguja desafilada o de tamaño inadecuado para la tela.

Adapta el grosor del hilo al tejido: utiliza hilo extrafino para tejidos delicados o ligeros (como la seda o la gasa) y hilo extrafuerte o resistente para tapicerías o materiales gruesos.